Para empezar con buen pie, o con buena mano en este caso, elegimos uno de mis temas favoritos...LAS CARICIAS!!
La piel es nuestro órgano sexual más extenso y muchas veces no le prestamos toda la atención que merece, está repleta de terminaciones nerviosas y si la estimulamos correctamente nos puede generar grandes dosis de placer.
Las caricias constituyen una forma de comunicación muy importante y necesaria, en la pareja. Crean intimidad y nos hacen sentir bien, ya que nos ayudan a liberar endorfinas, hormonas que producen relajación y nos generan felicidad. Las caricias activan nuestros centros nerviosos del placer.
Además de placer, las caricias ayudan a disminuir el dolor, reducen el riesgo de sufrir depresión y fortalecen nuestro sistema inmune.
Desde que nacemos el contacto físico, como las caricias o el contacto piel con piel, reporta beneficios en el bebé creando un apego positivo y reduciendo el estrés y las emociones negativas que se hayan podido producir durante el parto. Ya de adultos se ha demostrado que las parejas que dan y reciben más caricias tienen mejor estado de salud. De hecho, hay un estudio que revela que se reduce el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, ya que reduce la presión arterial y además, ayudan a mejorar la función pulmonar.
Las caricias mejoran nuestra salud y son una fuente incombustible de placer, ¿qué más se puede pedir? Pues ya puestos, que mejoren nuestra vida sexual, ¿no? Pues no sufráis porque son tan mágicas que también lo hacen, ¿no os decía yo que eran una de mis prácticas favoritas?
Efectivamente, las caricias son un elemento fundamental en nuestra sexualidad. Pero quiero subrayar que habitualmente no se aprovecha todo su potencial, se suelen usar como un medio para alcanzar un fin en lugar de disfrutarlas en sí mismas, es decir, que suelen ser la antesala del coito sin reparar en su importancia.
Las caricias son un elemento esencial para comunicarnos y conocer mejor al otr@, además generan confianza entre los miembros de la pareja y es una práctica muy placentera.
¿ Qué ocurriría si les prestáramos toda nuestra atención, sin esperar nada más?
Podemos descubrir un mundo nuevo de sensaciones y sentimientos en pareja. Romper con la rutina explorando juntos nuestro mapa erógeno, conociéndonos mejor el uno al otro.
Para sacarle todo el partido a las caricias en pareja intenta abandonarte al placer, hazlo consciente. No sólo la persona que recibe, sino también la que las da. Pon toda la atención a cada movimiento, explora cada centímetro de piel de tu pareja poniendo cariño y lujuria en cada movimiento. No acaricies como algo mecánico, pon sentimiento y tu pareja lo notará. Realiza movimientos suaves, cambia el ritmo y la intensidad.
La persona que recibe tiene que estar relajada y centrada en todas las sensaciones. También puede guiar a su pareja hacia las zonas que más le guste que le acaricien. ¿Sabes cuáles son las tuyas? ¿que tal si te dejas llevar y descubres sensaciones nuevas?.
Si queréis podéis utilizar complementos, vendas para los ojos, plumas, aceites,... Os propongo el lubricante de silicona EROS MASAJE ORIENTAL, con el que podréis acariciaros todo el cuerpo incluso la zona genital si la cosa se enciende mucho, ya que se puede utilizar para dar masajes y como lubricante.
Consejos para favorecer las caricias en pareja:
- Acordad un tiempo para dedicar a acariciaros mutuamente, al principio puede que os cueste un poco, pero si sois constantes creareis un hábito.
- Dormid desnudos. Esta simple acción va a favorecer que estéis más en contacto y que las caricias fluyan solas. Es una buena forma de aumentar el deseo.
¿Y si no tenemos pareja? También se puede disfrutar de las caricias en soledad. Muchas veces nos olvidamos de mimarnos a nosotros mismos. La masturbación en solitario suele centrarse sólo en una estimulación mecánica de los genitales, si es tu caso, prueba a acariciar tu cuerpo deteniéndote en cada sensación, seguro que la experiencia es mucho más intensa y placentera.
Recordad que los besos también son un tipo de caricia y se pueden explorar muchas variantes.
Os propongo trabajar vuestro sentido del tacto como deberes para la 'vuelta al cole', a ver quien saca mejor nota a final de curso. =^.^=
